Seductora de hombres y mujeres, la política ve desfilar muchos tipos de parejas.
En este 14 de febrero, repasamos cuáles son las parejas que más están dando de qué hablar en el círculo rojo poblano en este 2022.
Miguel Barbosa y Rosario Orozco
Una pareja ejemplar en todos los aspectos es la conformada por el gobernador Miguel Barbosa Huerta y María del Rosario Orozco Caballero.
Llevan juntos más de tres décadas. Tienen dos hijos, María del Rosario y Miguel, ambos al igual que sus padres, estudiaron Derecho.
Por más de 30 años, Orozco Caballero ha sido unos de los principales pilares del hoy gobernador del estado de Puebla.
Se sabe que la señora Chayito es parte fundamental de las decisiones tomadas por su esposo. Su grillito cantor. No hay nada que Barbosa ejecute sin el consejo de su amada.
Eduardo Rivera y Liliana Ortiz
Los panistas, la mayoría de ellos, se jactan de tener matrimonios sólidos pero no siempre es verdad.
Aunque donde si existe el tan anhelado amor por casi todos es entre el presidente municipal de Puebla Eduardo Rivera y Liliana Ortiz, quienes llevan más de dos décadas juntos, tres hijos y un nieto.
Ella, Lily, como le dicen en confianza, no solo ha apechugado crisis políticas de su esposo como cuando Moreno Valle quería meterlo a la cárcel y dejar a su familia en la calle.
El matrimonio atravesó hace un par de años por una esta tormenta política orquestada desde la otrora Casona de Los Fuertes. Hoy su escenario es distinto. Les sonríe tanto que podrían llegar a la grande.
Héctor Sánchez y Mónica Silva
Héctor Sánchez, presidente del Tribunal Superior de Justicia y Mónica Silva, actual diputada local, son la pareja de moda en la clase política poblana.
Aunque su matrimonio fue sorpresivo pues estaban separados y cada quien rehaciendo su vida de repente, ¡zaz!, reaparecieron públicamente en un evento “más enamorados que nunca“.
No es que uno sea mal pensado, pero ¿qué no era ya algo pasado?
En fin; lo cierto es que sumando la primera y segunda temporada ya llevan años juntos y no hay evento social ni político pa’ donde vayan que no los volteen a ver.
El presidente del Tribunal Superior de Justicia y la diputada local son una de las parejas más atractivas en la escena y de las que se seguirá hablando en los próximos años.
No vaya a resultar que el Frank y la Claire Underwood se nos terminen quedando cortos.
No los pierda de vista pues ahí como los ve podrían ser los próximos “Underwood”. Nunca se sabe.
Paola Angón y José Luis Carpinteyro
La presi de San Pedro Cholula, Paola Angon, y el titular de Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de aquel municipio, José Luis Carpinteiro, es un amor reciente; incluso, son discretos, camuflajean su amor; pero siempre hay un guiño, como aquel tuit en donde la alcaldesa reconoce el trabajo del organismo a cargo de su pareja.
Incluso, la alcaldesa derrama miel en las redes sociales y aprovecha la fecha para destacar que, en Cholula, “el amor se vive”.
Además, invita a las y los ciudadanos a disfrutar en familia o con los amigos de los hermosos paisajes que San Pedro tiene. “Ven con tu familia, pareja o amigos al Parque Soria - Xelhua y festeja con #LoveCholula”, señala en sus redes sociales.
Karina Romero y Edgar Chumacero
Las abuelas dicen que lo que mal empieza, mal termina.
Y es que la relación entre estos dos jóvenes políticos se vio atropellada desde el principio por la falta de aceptación de la entonces presidenta municipal de Puebl Blanca Alcalá a quien no le simpatizó el noviazgo.
Pese a eso, Karina Romero Alcalá y Edgar Chumacero se casaron y tuvieron una hermosa hija. Fueron en su momento una las parejas más populares en la aldea poblana; sin embargo, los problemas de pareja que fueron muuuuy públicos se acentuaron y el amor llegó a su fin.
Los jóvenes se distanciaron. Se separaron, regresaron, se separaron y así muchas veces pero al parecer ahora si es definitivo su divorcio.
No obstante, continúan en la arena política, ella al frente de la Secretaría de Igualdad Sustantiva en el municipio de Puebla. Él como funcionario del gobierno de Libres.
Por cierto, dicen en el palacio de Charlie Hall que la joven priísta, aún utiliza sus argollas de matrimonio. ¿Será?
René Sánchez Galindo y Liz García Vilchis
La 4T no se puede quedar atrás y una de las parejas emblemáticas durante la gestión de Claudia Rivera Vivanco fue la de Elizabeth García Vilchis y René Sánchez Galindo.
Su amor floreció años atrás y era una pareja aparentemente estable; sin embargo, dicen las malas lenguas, él quedó embelesado con alguien de su equipo de trabajo (ups) y ella saltó a la fama (aunque muy mala por cierto) en la escena nacional convirtiéndose en la vocera del “Quién es quién en las mentiras”, un personaje controvertido y muy vergonzoso para los poblanos.
Durante su matrimonio tuvieron un hijo.
Bernardo Arrubarrena y Maru Verdín
Una pareja joven, la cual utiliza sus redes sociales para cacarear su amor es la conformada por el panista de cepa Bernardo Arrubarrena y Maru Verdín.
La periodista de Canal Seis siempre tiene palabras de amor y derrama miel para el actual secretario de Administración Pública; muestra de ellos son estas palabras: “siempre estaré agradecida y por tener la bendición de caminar de tu mano! Eres mi adoración y solo quiero que las cosas más increíbles te pasen”. (Sic)
Por cierto, son promotores del #TeamBonitos. ¿What's that? Dirían los chavorucos
Lo cierto es que gozan de ser el ojo del huracán en las redes. Veamos cuánto les dura el amor (esperamos que mucho, por supuesto).
Graciela Palomares y Luis Tiffein
Los otroras militantes priistas unieron sus vidas la década pasada; sin embargo, el amor se esfumó y como si fueran partidos políticos optaron por enterrar el pasado y vivir su vida cada uno por su cuenta, ya sin la atadura del matrimonio por lo menos eso se supo en los pasillos políticos de Puebla.
No obstante, hace apenas un par de días, los jóvenes políticos publicaron en tuiter una fotografía juntos, como muestra de la reconciliación.
¿Será que en verdad se quieren o estos dos tienen un plan para sus futuros políticos y necesitan mantenerse unidos? El tiempo, solo el tiempo nos mostrará la verdad.
Porque los jóvenes nunca proyectaron una estabilidad amorosa pues sus protagonismos le dan en la torre a su supuesto amor.
Nora Merino y René Santamaría
Ella barbosista de hueso colorado; él, un exmorenovallista confeso.
Su amor nació años atrás; sin embargo, la vida de la ex militante del Partido Encuentro Solidario cambió al arribo de la 4T a Puebla y la convirtió en una de las mujeres más poderosas ante los ojos del mandatario.
Pero fue de todos sabido que las infidelidades y las fiestecitas, con gente allegada a Xabi Albizuri, hoy prófugo de la justicia, salieron a relucir y el amor se fue marchitando.
Se dice que él no soportó el empoderamiento de la diputada y mucho menos su fidelidad al barbosismo.
Hoy, gozan de las mieles del divorcio, pero ella en mucho mejor posición política y económica que él. ¡Ouch!
Claudia Rivera y Roberto Zatarain
Su amor florece en los albores de la contienda electoral del 2018.
Claudia sorprendió a todos cuando fue ungida como candidata de Morena a la alcaldía de la Ciudad de Puebla; todos los reflectores voltearon hacia ella, incluidos Roberto, quien se apersonó con ella y comenzó a trabajar en aquella contienda electoral.
Conforme avanzó la campaña se convirtió en el coaching personal de la candidata y cupido los flechó. Lo demás es historia, ganó la elección y el se convirtió en unos de los principales pilares durante su gobierno.
Dejaron el barrio de San Miguelito para vivir su romance en la zona exclusiva de Angelópolis.
Y aunque nunca ocupó un lugar como pareja públicamente, Don Roberto no lo necesitó pues es bien sabido que era el mero mero de los negocios. Así hasta a mí, que me escondan.
Carlos Meza y Alejandra Macchia
El famoso abogado Carlos Meza Viveros y la periodista y escritora Alejandra Machia llevan más de 3 años juntos.
El tórrido romance inició luego de que la ex pareja de ella, el también periodista Mario Alberto Mejía los presentara una tarde en el restaurante Mochomos ; si, así como lo lee -open mind, les dicen-.
Ahí, en aquella tarde de ginebras y tequilas , el controversial abogado quedó prendido de los encantos de “la negra” como le dicen sus amigos y enemigos. Desde entonces son separables e inseparables.
Ambos, con fuertes personalidades llenas de ego y poder, mantienen una relación estable pese a los pocos buenos augurios que recibieron al inicio de su intenso noviazgo.
