El chapulineo es una práctica enquistada en la política mexicana, no se puede entender el escenario actual sin esta recurrente práctica.
Sin embargo, desde San Lázaro buscan contrarrestar estos brincos políticos.
La diputada federal Carolina Beauregard presentó iniciativa que reforma y adiciona los artículos 26 y 30 de la Ley Orgánica del Congreso General, para precisar que la diputada o diputado independiente o sin partido no podrá integrarse a otro grupo parlamentario por el resto de la respectiva legislatura.
“El objetivo, evitar que las diputadas y los diputados que renuncien a su grupo parlamentario puedan sumarse a otro en la misma legislatura, rompiendo el equilibrio de fuerzas y traicionando a quienes votaron por ellos”, argumentó la diputada federal.
Además, añade que la diputada o diputado suplente no podrá integrarse a un grupo parlamentario distinto al que integró la o el titular, y los diputados que no se inscriban o dejen de pertenecer a un grupo parlamentario, serán considerados como diputados sin partido.
La iniciativa en cuestión se envió a la Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias para su análisis.
El mejor ejemplo lo vimos en Puebla en la LX Legislatura del Congreso del Estado, en donde los cambios y enroques en las bancadas fueron una constante.
Recordemos, Nora Merino Escamilla llegó, en 2018, al recinto legislativo bajo el cobijo del entonces Partido Encuentro Social; sin embargo, un año después dejó dicha fracción y se incorporó a Morena, en donde jugó un rol protagónico en aquella legislatura.
Marcelo García Almaguer soñó con ser el presidente de la Junta de Coordinación Política en dicha legislatura; sin embargo, no fue así. Incluso, dejó la bancada del Partido Acción Nacional y concluyó su encargo como diputado “independiente”.
El PAN postuló por el distrito 6, con cabecera en Teziutlán, a María del Carmen Saavedra Fernández, quien ganó en las urnas, formó parte de la bancada del blanquiazul; sin embargo, sus diferencias con la entonces dirigente estatal de dicho instituto, Genoveva Huerta, la orillaron a dejar el grupo legislativo; primero se refugió en el bloque “independiente”, al final, encontró un lugar en la bancada de Morena.
Otro ejemplo del chapulineo en esa legislatura fue el de Hugo Alejo Domínguez, quien brincó de la bancada del PAN al bloque independiente.
Jonathan Collantes llegó a la LX Legislatura poblana con las siglas de Nueva Alianza, sin embargo, decidió separarse y quedar como diputado, sin partido, a final se suma a las filas del priismo.