Carlos Romero Deschamps, uno de los últimos generales del viejo régimen, del PRI corporativo, murió a los 79 años; un infarto, la causa del deceso.
Durante más de dos décadas fue el hombre más poderoso de Pemex. Aquel chofer de una pipa de la paraestatal escaló y con el paso de los años, allá por 1993, tomó las riendas del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana.
Pero, la sombra de la corrupción y el desvío de recursos fuero un sello indeleble en su administración. En esos años amasó un enorme patrimonio marcado por carros de lujo, una colección exclusiva de relojes Rolex, propiedades en resorts y yates, por citar algunas de sus “prebendas”.
Originario de Tampico, nuestro personaje fue electo por primera vez líder sindical el 25 de junio de 1993, en sustitución de Sebastián Guzmán Cabrera, quien a su vez había sustituido al frente del sindicato petrolero a Joaquín Hernández Galicia, “La Quina”
Pero, hagamos rápido un ejercicio de memora, su carrera en Pemex comenzó como chófer de pipas y al interior del sindicato, en 1971, fue uno de los comisionados para la revisión del contrato colectivo de trabajo.
En los años ochenta fue secretario del Interior y Acuerdos y fue electo como líder por primera vez el 25 de junio de 1993, en sustitución de Sebastián Guzmán Cabrera, quien estuvo al frente del sindicato a la caída de Joaquín Hernández Galicia, La Quina, en enero de 1989.
Sin embargo, con el arribo de la Cuarta Transformación al Gobierno de México, Romero Deschamps renunció a su cargo, en octubre de 2019; sabedor del escenario, Romero se mantuvo lejos de los reflectores de la política; para no ser juzgado por el dedo inquisidor del líder moral de Morena, Andrés Manuel López Obrador.
Recordemos
Romero Deschamps fue un soldado fiel al Partido Revolucionario Institucional. Su disciplina fue recompensada, fue senador y diputado, y apoyó la reforma energética del presidente Enrique Peña Nieto.
En cinco ocasiones fue legislador, tanto en la Cámara Alta como en la Baja, y todas por representación proporcional; es decir, por la pluri, en los periodos de 1979-1982 y de 1991-1994.
En tres ocasiones fue diputado federal y en otras dos trabajó como senador, en los años de 1994-2000 y de 2012-2018.
Romero Deschamps estuvo al frente de los trabajadores de Pemex, cuando el entonces Instituto Federal Electoral comprobó que de los 640 millones de pesos que Pemex envió al STPRM, funcionarios del PRI retiraron en efectivo 500 millones de pesos un mes antes de las elecciones del 2000, dinero que se dirigió a la campaña del entonces candidato presidencial Francisco Labastida, ese escándalo se conoció como el Pemexgate.
Este día, el presidente Andrés Manuel López Obrador externó sus condolencias a la familia.
“Les deseo consuelo y resignación a sus familiares y a sus amigos, porque a nadie se le debe desear la muerte”, señaló.